(In)Decisión

¿Cuántas veces a lo largo de nuestra vida se nos presentan decisiones? Y de ellas, ¿cómo hemos sabido que ha sido la correcta?
Imagino que nunca, nunca, sabremos cosas cómo si realmente hemos obrado de la forma correcta o si hemos tomado el mejor camino de dos, tres o los que fueren.
Que sí, salimos a flote triunfamos, somos felices, tenemos cosas que no queremos, pero que nos hacen la vida mas fácil, a la par que nos dan un confort para nuestro día a día.

Pero, por un momento, pararos a pensar... ¿Y si hubieras tomado el camino de la derecha, la pastilla azul, no hubieras entrado en la madriguera del conejo?
Sí, las cosas serían distintas pero, obviamente, no seriamos nosotros mismos...

Aunque, y muy a mi pesar, las decisiones solo son algo transitorio -para mí-.
Os explico. Pongamos por caso que esta vida, nuestra vida, solo sea mera "ilusión", un reflejo de lo que ya vivimos -e aquí mi teoría de los déjà vus-. Visto de otro modo, las decisiones, ya han sido tomadas -preparaos, viene chorrada existencial con rollo metafísico mega guai de los que tanto me molan :)-.
Cada vez que se nos presenta "una gran decisión" -cada uno lo puede interpretar como quiera-, nuestro "universo" se parte en cada posible camino -SÍ! Universos Paralelos-, bifurcando, así, nuestro camino en la vida.
Nuevamente, como decía, nuestra vida ya está "construida", como el reflejo que somos.
Entonces.. ¿Para que tomar decisiones?, ¿para que calentarse la cabeza si todo está "prefabricado"?
Supongo, qué, por mucho que uno haya "vivido", no puede dejar de hacerlo, es lo que nos convierte en humanos, y, al mismo tiempo, nos hace sentir partícipes de esto. Algo tan jodidamente grande que se escapa de nuestras manos, pero, aun así, nos maravilla el poder seguir adelante.


En conclusión... Carpe diem, cojones, que Hoy, gano yo :)




Pd. : Actualmente la cosa está 30% magisterio/70% guionista